En la segunda sesión de clases, la Lic. Karla Jimenez nos dió la bienvenida al curso y nos presentó nuevamente el objetivo principal del curso y el compromiso que representa para nosotros la misión de hacer esta labor comunitaria. Nos comunicó la gran importancia que tiene para la sociedad y para nuestra formación como personas realizar esta tarea de la mejor manera posible, con entusiasmo y compromiso para ayudar a formar a otros que lo necesitan.
Creo que esta bienvenida elevó los ánimos de todos para iniciar las actividades con más energía y entusiasmo.
Posteriormente a la bienvenida, proseguimos a tratar el tema de la asignación de horarios para dar clases. Para esto, la semana pasada se nos asignó llevar nuestro horario de clases marcado con las horas que teníamos disponibles para asistir a la comunidad. En base a esto, la profesora consideró nuestras preferencias y disponibilidad para asignarnos las clases, días y horarios que más se adaptaran a nosotros.
A mí se me asignó, junto a mi compañero Eduardo Angulo, el grupo de computación para niños los días lunes y miércoles de 3:30 a 5:00 pm.
Comunidad
Durante la segunda parte de la clase del lunes, fuimos con la profesora a conocer la comunidad y la incubadora en donde se impartirán las clases a los niños y adultos. La comunidad no era muy parecida a lo que en realidad me imaginaba. Se parecía en cuanto a aspectos físicos del terreno, la estructura de las casas y ese tipo de características. Sin embargo, me llevé una gran sorpresa al darme cuenta de que mucha de la gente que vive y va a la escuela en esa parte de la ciudad no carece tanto de recursos como me lo imaginaba. Mientras veía calles sin pavimentar y paredes despintadas, volteaba a un costado y veía carros muy lujosos e incluso de último modelo estacionados en las casas y escuelas de los alrededores; creo que no recuerdo haber visto un automóvil cuyo modelo bajara del año 2001. Esto, debo admitir, me sorprendió bastante.
La incubadora me pareció un lugar muy agradable, no tan pequeño como me lo habían descrito otros compañeros que habían tenido ya la oportunidad de conocerlo. Se nos atendió de una forma muy amable y se nos dió la oportunidad de conocer los salones de clases en los que daríamos nuestra clase.
Incubadora Social del ITESM en Industrial El Palmito
En mi caso, puedo decir que me pareció muy cómodo y adecuado el salón de
cómputo, sitio que en unas semanas se convertirá en mi espacio de
trabajo. El equipo y el mobiliario se encuentran en muy buen estado, lo
que indica que hay un buen mantenimiento y respeto a los bienes
materiales que se encuentran dentro de la incubadora.
Esta será mi área de trabajo a lo largo del semestre
Los niños se mostraron muy interesados al serles entregados los
volantes y la información de los cursos
Los niños se mostraron muy entusiasmados acerca de los cursos y más de uno pidió más información al respecto o expresó que ya había asistido anteriormente a los cursos de la incubadora.
Espero que esta experiencia sea muy agradable y contributiba para mí y mi formación. Estoy muy entusiasmado por comenzar esta interesante labor.
Algunos de los compañeros que estaremos trabajando en este
proyecto durante el semestre